Visita a Sóller. La idea es relajarse y estar en un lugar precioso, y hacer un poco lo que queramos sin ningún tipo de prisa. Si nos apetece tomar algo o incluso cenar pues no hay problema. Hay sitios que no están nada mal, la verdad. Incluso hay una pastelería café que está la mar de bien y tiene sitios exclusivos, un sitio que está arriba en una salita pequeñita. Tiene su encanto. Me encantaría conocer gente sana que busque la espiritualidad y el buen rollo.